La liturgia de la iglesia, en estos últimos días del año litúrgico, nos invita a leer el libro del Apocalipsis, y meditar sobre lo que en él se nos dice. Concretamente, en la Misa de este día, se nos advierte de un peligro: "has dejado enfriar tu primer amor". Esta frase es lo que el ángel enviado a las siete iglesias, dice a la iglesia de Éfeso.
Y es verdad, la rutina de la vida y la cantidad de actividades a veces nos hacen perder el rumbo, el sentido primero de todo. Recurramos hoy a la fuente, al origen de todo: Dios. Pensemos cuándo conocimos al Señor, cómo fue aquel encuentro, cuándo nos decidimos a darlo todo por Él... Eso nos ayudará a retomar las fuerzas primeras y a vivir verdaderamente entregados a Él.
Que María nos ayude.
No hay comentarios:
Publicar un comentario