Novena a la Virgen del Carmen

Ha comenzado ya la Novena dedicada a la Virgen del Carmen, patrona de los marineros y quien nos anima a llevar su santo escapulario, para que nos proteja del mal y sea para nosotros prenda del cielo. En Valladolid, el Santuario del Carmen de Extramuros se viste de gala en esepcial en estos días para realizar este solemne novenario. Podéis encontrar todos los actos y cultos en el siguiente blog: www.carmenextramuros.blogspot.com 
 

 



No tenéis más que copiar la dirección y pegarla en el buscador de internet y ahí podréis ver todo lo que en estos días se realizará en honor de nuestra Madre, la Reina del Carmelo y estrella de los mares. 
 

 

Ojalá que María sea nuestra fortaleza, ayuda, y nuestra humilde intercesora en el camino de la vida. 


Cristo en las redes sociales

Estamos en el tiempo de las redes sociales: Facebook, tuenti y Twitter son tres grandes redes que cada día unen a miles y miles de usuarios. Puede ser, sin duda, un buen lugar para el intercambio de ideas y para charlar con otros, además de informar y promocionar eventos. Sin embargo, no hemos de olvidarnos que también en las redes sociales estamos llamados a testimoniar nuestra fe y anunciar a Jesucristo, vivo, resucitado, y que vive con nosotros. Ojalá que así sea, no nos avergoncemos de llamarnos cristianos.

Domingo, día del Señor

 Es domingo, día del Señor, día del descanso y de estar con la familia. Ojalá que en este día, comienzo del mes de julio, no dejemos de lado al Señor y le honremos en medio de nuestras vacaciones. Que el Evangelio de hoy nos ayude a todo ello. Feliz mes de julio, feliz verano para todos, acompañado de María y de su Hijo Jesús. 


En aquel tiempo, Jesús pasó de nuevo en la barca a la otra orilla y se aglomeró junto a Él mucha gente; Él estaba a la orilla del mar. Llega uno de los jefes de la sinagoga, llamado Jairo, y al verle, cae a sus pies, y le suplica con insistencia diciendo: «Mi hija está a punto de morir; ven, impón tus manos sobre ella, para que se salve y viva». Y se fue con él. Le seguía un gran gentío que le oprimía. Entonces, una mujer que padecía flujo de sangre desde hacía doce años, y que había sufrido mucho con muchos médicos y había gastado todos sus bienes sin provecho alguno, antes bien, yendo a peor, habiendo oído lo que se decía de Jesús, se acercó por detrás entre la gente y tocó su manto. Pues decía: «Si logro tocar aunque sólo sea sus vestidos, me salvaré». Inmediatamente se le secó la fuente de sangre y sintió en su cuerpo que quedaba sana del mal. Al instante, Jesús, dándose cuenta de la fuerza que había salido de Él, se volvió entre la gente y decía: «¿Quién me ha tocado los vestidos?». Sus discípulos le contestaron: «Estás viendo que la gente te oprime y preguntas: ‘¿Quién me ha tocado?’». Pero Él miraba a su alrededor para descubrir a la que lo había hecho. Entonces, la mujer, viendo lo que le había sucedido, se acercó atemorizada y temblorosa, se postró ante Él y le contó toda la verdad. Él le dijo: «Hija, tu fe te ha salvado; vete en paz y queda curada de tu enfermedad». Mientras estaba hablando llegan de la casa del jefe de la sinagoga unos diciendo: «Tu hija ha muerto; ¿a qué molestar ya al Maestro?». Jesús que oyó lo que habían dicho, dice al jefe de la sinagoga: «No temas; solamente ten fe». Y no permitió que nadie le acompañara, a no ser Pedro, Santiago y Juan, el hermano de Santiago. Llegan a la casa del jefe de la sinagoga y observa el alboroto, unos que lloraban y otros que daban grandes alaridos. Entra y les dice: «¿Por qué alborotáis y lloráis? La niña no ha muerto; está dormida». Y se burlaban de Él. Pero Él después de echar fuera a todos, toma consigo al padre de la niña, a la madre y a los suyos, y entra donde estaba la niña. Y tomando la mano de la niña, le dice: «Talitá kum», que quiere decir: «Muchacha, a ti te digo, levántate». La muchacha se levantó al instante y se puso a andar, pues tenía doce años. Quedaron fuera de sí, llenos de estupor. Y les insistió mucho en que nadie lo supiera; y les dijo que le dieran a ella de comer.