Margarita María de Alacoque

Hoy, fiesta de Santa Margarita María de Alacoque, os ofrezco un breve vídeo que resume en pocas palabras, la vida de esta gran santa.
Miremos en este día al Corazón de Jesús, "que no es amado, y que en compensación a su gran amor no recibe más que ultrajes y ofensas".



Teresa, intercede por nosotros


Feliz día de Santa Teresa de Jesús, doctora de la iglesia. Digamos en este día, como ella, algunas de estas palabras:


"Vuestra soy, para Vos nací, ¿qué mandáis hacer de mí?".

"Melancolía no la quiero en casa mía".

"Nada te turbe, nada te espante, quien a Dios tiene nada le falta, solo Dios basta"


Encomendemos hoy a todas las carmelitas, que tienen a Teresa como patrona y fundadora. Pidamos también por todos aquellos que no conocen a Jesucristo, para que Santa Teresa interceda por ellos.

Teresa de Jesús, la andariega de Ávila

Mañana celebramos la fiesta de Santa Teresa de Jesús, he aquí una de sus oraciones más conocidas. Pidamos su intercesión.


Consagración a María


¡Madre del alma, celestial María! Con toda la ternura, el amor y el deseo de mi corazón te elijo desde hoy como Reina, Señora y Madre de mi corazón. Toma las llaves que te entrego como a la ama y Señora, y concédeme la dicha de ser tu esclavo y tu hijo muy amante, que sólo quiere ser tuyo y obedecerte con todo el corazón y el alma.

Concédeme, que nada haga sin consultártelo, que obre en todas las ocasiones como tu obrarías, con esa perfección de miras e intenciones sobrenaturalizándolo todo, y con una vida de amor más del cielo que de la tierra. Así quiero santificar mis actos.
Tú, desde hoy, serás para siempre la Señora, la dueña y la Madre de mi vida.
Quiero estar siempre en segundo término, Madre mía, porque tu eres la primera en mí y en cuanto me rodee.
Desde ahora hasta mi muerte, quiero vivir bajo el manto de mi dulce Madre, y ya no estaré solo ni huérfano, sino bajo tu dirección y tus miradas, María, inmolándome en tu honor.
Te amo, y te haré amar con todas mis fuerzas, y mi vida. Acepta por adelantado las penas y alegrías que pueda darte. ¡Oh mi bendita y amada Madre! Que desaparezca yo con todos mis defectos, y que parezcas tú en mí, con tu dulzura, tu caridad, abnegación, paciencia, humildad, y con todas tus demás virtudes.


¡Oh mi Reina, somos tus vasallos!! Oh mi Madre, mi amada Madre, somos tus hijos! Amén.

María: el pilar en el que nos apoyamos

Celebramos hoy, en toda España, la fiesta de la patrona de la Hispanidad, Nuestra Señora del Pilar. Como es costumbre en este blog, Jorge Ramírez nos ayuda a vivir esta fiesta, con una bonita y sencilla reflexión:

La Virgen se apareció en Zaragoza a Santiago Apóstol en carne mortal (aun sin haber pasado por el transito o dormición), para alentarlo y animarlo en sus predicaciones en España.

Es el gran privilegio que tiene este país, el que la Virgen le visitase en carne mortal y le pidiese que se erigiese un templo dedicado a ella, el primer templo del mundo dedicado a la Santísima Virgen María.
Se apareció posada en un pilar de jaspe, el Santo pilar.


¿Quién es María? María es nuestro pilar y el pilar de la Iglesia. Pilar en el que se fundamenta nuestra creencia, por ella recibimos al Autor de la Vida. Ella es Madre de todos nosotros, Madre de la iglesia, y reina y señora de todo lo creado. Precisamente por eso alegóricamente supo aparecerse sobre un pilar, para recordarnos cada día que ella es el pilar de nuestra religión, el pilar de nuestras vidas, pilar que sostiene el mundo, a la cristiandad y que nos sostiene a nosotros, a nuestras familias en las cruces que cada día llevamos, no dejándonos caer, a Ella como dicho pilar es a la que tenemos que acudir frecuentemente, diciéndole: "Madre sé mi pilar, sé tú la columna fuerte que me sostenga, sostén al mundo entero y ruega a Dios nuestro Señor por nuestra conversión y perdón de los pecados que cometemos, no dejes que nuestras vidas se hundan, sosténnos en todo momento y acompáñanos en nuestro caminar".


Virgen del Pilar, ruega por nosotros.

"Yo soy la Inmaculada Concepción"

He aquí una entrevista fabulosa que Don Jesús Hernández, sacerdote de Valladolid y consiliario de la Hospitalidad de Nuestra Señora de Lourdes de esta diócesis, hace a Don Horacio Brito, sacerdote y rector del Santuario de Lourdes, en Francia.