Entender la Palabra de Dios


Otro amigo me ha pasado esta bonita reflexión. Cuántas veces no entendemos pasajes de la Biblia, o se "nos atragantan" porque lo que aparece nos resulta duro o no nos convence.... He aquí un ejemplo de ello. Feliz día, pidamos ayuda al Espíritu Santo, para que nos ayude a comprender cada vez más y mejor la palabra de Dios.


Ayer estaba leyendo nuevamente un pasaje del evangelio de Mateo que dice lo siguiente:


“…Otro de sus discípulos le dijo: Señor, permíteme que vaya primero y entierre a mi padre. Jesús le dijo: Sígueme; deja que los muertos entierren a sus muertos". (Mt 8, 21-22)

Cuando comencé a estudiar la Biblia este fue uno de esos pasajes que me costaba “digerir”. ¿Cómo era posible que el Jesús de los Evangelios se mostrara tan insensible ante al muerte del padre de un discípulo suyo? El mismo Jesús que lloró ante la tumba de Lázaro. No es posible.

Al parecer, el texto da a entender que los muertos espirituales (es decir, los que no creen) entierren a los muertos físicamente. Pero tampoco me vale. Y no me vale porque la muerte de un familiar directo siempre produce dolor. Tanto si es creyente como si no lo es. Y además ¿No dice la Escritura que hemos de honrar a nuestros padres?

Y a mí me surgía otra pregunta: ¿Tanta prisa tenía Jesús que no podía esperar al entierro?

No. Me estaba equivocando. No es así.

Con el tiempo y leyendo algún comentario que otro, llegué a entender que en el contexto judío cuando se habla de “enterrar a un padre” es como decir: “Déjame que viva con él hasta que muera”.

¡Esto si que me vale! Ahora puedo entenderlo. Y es así porque no solo me satisface el análisis textual sino el contexto cultural en el que se produce este hecho.

Para los que hemos nacido en el sur, nos es muy familiar la expresión:
“Éste nos va a enterrar a todos”. Queriendo decir que vivirá más que nosotros.

Con los años, doy gracias a Dios porque textos como éste, al contrario de provocar dudas en cuanto su veracidad, son muestras de fidelidad de cómo los evangelistas recogieron los dichos de nuestro Maestro y los primeros cristianos los guardaron “como oro en paño”.

2 comentarios:

beatriz dijo...

gracia por la aclaratoria hoy entendi el mensaje..

beatriz dijo...

gracia por la aclaratoria hoy entendi el mensaje..