"Contigo, Señor, todo es más fácil"

 

La Cuaresma es tiempo de misericordia y salvación. A menudo nuestra vida se ve sumergida entre las aguas de un mar tempestuoso. Muchas veces el camino se nos hace difícil, muy cuesta arriba, incluso percibimos que nos ahogamos, pero siempre está el Señor para lanzar su salvavidas, su flotador, que nos permita estar tranquilos en medio de la dificultad. 

En este tiempo de Cuaresma, miremos al crucificado con ojos de agradecimiento y no nos cansemos de mirarle y agradecerle lo que cada día hace por nosotros. Hoy, viernes, será buen día para contemplar su Pasión a través del rezo del Vía Crucis, y también para ahcer algo por los demás, sabiendo que la conversión consiste en acercarse cada día un poco más a Dios y a los hermanos que Él nos ha regalado y puesto a nuestro lado. 

"Señor, gracias por estar cerca de mí cuando me hundo, cuando parece que todo está acabado. Contigo todo es más fácil, contigo todo cambia. Gracias, Señor, por salir a mi encuentro".

No hay comentarios: