"En tu Corazón quiero habitar, Señor"

En este día, os animo a poner toda nuestra existencia en el Corazón de Cristo. ¿Acaso hay mejor refugio que las entrañas misericordiosas de quien nos ha creado? Digámosle al Señor que nos acoja en su Corazón, que nos llene de su paz y amor, para poder irradiarlo a los demás, y sobre todo, que nos haga dóciles y disponibles para hacer en todo lo que Él quiera.


María, si por algo destacó, fue por ser sencilla y humilde, esclava dócil del Padre. Sirvámonos de su ejemplo, e imploremos su intercesión. A través de Ella, nos consagramos hoy al Corazón de Cristo, fuente eterna de amor y de vida.

Oh Señor Jesús, a tu Sagrado Corazón
confío toda mi existencia. Solo mírame,
y haz conmigo lo que tu Corazón indique.

Deja que tu Sagrado Corazón decida...
Yo confío en ti... Me abandono en tu Misericordia,
Señor Jesús! Ella no me fallará.
Sagrado Corazón de Jesús, en ti confío.
Sagrado Corazón de Jesús, creo en tu amor por mi.
Sagrado Corazón de Jesús, que venga tu Reino.

Oh Sagrado Corazón de Jesús, te he pedido por tantos favores,
pero con ansias te imploro por esta petición.

Tómala, ponla en tu abierto y roto corazón,
y cuando el Padre Eterno la mire, cubierta por tu Preciosa Sangre,
no podrá rehusarla.

Ya no sera más mi oración, sino la tuya, Oh Jesús.
Oh Sagrado Corazón de Jesús,
pongo toda mi confianza en Ti.

No hay comentarios: