"He aquí el Corazón que tanto ha amado a los hombres, y en compensación es ultrajado y ofendido. ¿Estás dispuesto a ser reparador de este Corazón? El Señor llama a tu puerta cada día, ábrele, y entrará para cenar contigo"
La unión con Dios
En este día, pongo a vuestra disposición una sencilla oración que me han enviado. Ojalá nos sirva para orarla varias veces y demostrar, de esta manera, nuestro amor a Jesús, y nuestro deseo de unión a Él. ¿Qué es unirse a tí, Señor?
El Señor nos responde: Es pensar en mí, es hablar conmigo como el mejor y más dulce amigo. Es buscar mis intereses, es sufrir por mi causa. Es preocuparse de mi reino, es recordar mis sufrimientos. Es derramar tu amor en mi amor: ÁMAME COMO PUEDAS, YO PERFECIONO.
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1 comentario:
"Yo perfecciono" ¡qué bonito y qué cierto! El Señor acepta nuestro torpe amor, y lo potencia.
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